lunes, 20 de febrero de 2012

                                         ESCRITORIO ECONÓMICO
                                         M.N.I. Jaime E. Mondragón M.
                                        mondragonjaime@hotmail.com


Hace unas semanas leí un artículo de cuestiones económicas que se refería a los
pronósticos, descalificándolos relativamente. Este autor se expresaba de ellos en
una manera interesante que yo comparto. Lo resumo:

"Cuando un gobierno evade su obligación rectora de la economía, la deja al garete
de "las fuerzas del mercado", y desaprovecha por consecuencia todo el
instrumental económico con que cuenta (planeación inductiva, políticas sectoriales
de fomento, medidas fiscales, monetarias, crediticias, de inversión...) hablar de
prospectiva es casi perder el tiempo con estimaciones, pronósticos y proyecciones
harto erráticas y con muchísima frecuencia, fallidas”. (David Márquez Ayala:
EXPECTATIVAS ECONÓMICAS 2012).

Con el párrafo anterior en calidad de advertencia, continúo con el escabroso tema
de los pronósticos económicos para el 2012. Y de entrada y a petición particular
de un economista hermosillense muy interesado en esta materia, le presento un
resumen de los indicadores cuantitativos que según los analistas
(gubernamentales y de los sectores empresarial y académico), México habrá de
alcanzar en este año señalado por las profecías apocalípticas. Aclaro que los
comentarios a cada indicador son míos y asumo la responsabilidad de ellos.

PIB

Con base en los registros económicos preliminares de cierre del ejercicio 2011 y
de las expectativas norteamericanas, se anticipa que en 2012 nuestro país podría
lograr 3.5% de crecimiento económico.

Al respecto yo apunté la semana pasada que requerimos un crecimiento anual
mínimo y sostenido de al menos 6% en los próximos 20 años para retomar los
indicadores socioeconómicos de 1982.

Lo anterior no implica que los indicadores de 1982 fueran excelentes ni mucho
menos, pero a partir de 1983 se inició la aplicación en nuestro país de las nefastas
políticas neoliberales (contenidas en un documento que se conoce como CARTA
DE INTENCIÓN) que nos impusieron arbitraria y unilateralmente el Fondo
Monetario Internacional (FMI), el Banco Mundial (BM) y el Departamento del
Tesoro norteamericano (EUA) como condición para (re)estructurar la Deuda
eXXXterna nacional de poco más de 82 mil millones de dólares.

EMPLEO

Se espera que el número de trabajadores asegurados en el IMSS aumente de 583
mil en 2011 a 569 mil durante 2012. De lograrse esta meta laboral apenas se
estaría satisfaciendo en 40% las necesidades reales de empleo formal que se
habrán de presentar este año. El 60% restante se sumará al enorme desempleo
que ya tenemos y que constituye un lastre pesado y un desperdicio muy
lamentable de recursos valiosos.

Agregue a los indicadores de desempleo del INEGI a los segmentos de población
subocupada y la que dejó de buscar empleo por no haberlo encontrado luego de
intensa y prolongada búsqueda (los registros del INEGI no los toman en
contabilizan adecuadamente).

Conviene mencionar que para envidia de muchísimos países, México tiene un
Bono Demográfico (un elevado porcentaje de su población en edad de trabajar).
Pero por no saberlo aprovechar, en la realidad lo que tenemos es una enorme
carga demográfica que nos ahoga. Sin embargo, este Bono nos ofrece una
promisoria Oferta de Mano de Obra que no se agotará en el presente o en pocos
años. Hay tiempo para obtener beneficio adecuado de esta disponibilidad de
población trabajadora.

DÉFICIT EXTERNO

Para 2011 se estima un déficit (saldo negativo) en la Cuenta Corriente de
aproximadamente 9 mil 600 millones de dólares. Para 2012 el gobierno estima que
el déficit será mayor (14 mil 607 millones). Yo tengo una visión más pesimista
toda vez que el año se caracterizará por la contracción mundial y nacional de
alimentos y materias primas para la industria provenientes del campo, lo que
elevará considerablemente sus precios. Este incremento de los precios ya lo
estamos resintiendo en enero.

De acuerdo con los datos arrojados por las fuentes de información oficial de
nuestro país, en estos primeros días del año que inicia el 70% de la superficie
agrícola sembrada se colapsó por razones climáticas y en consecuencia crecen la
urgencia y los volúmenes de alimenticios básicos y materias primas industriales a
importar.

Al respecto yo sostengo que más que la desgracia climática, la caótica situación
del campo y sus producciones decrecientes en gran parte son debidas al descuido
y abandono oficial en que se encuentra el sector primario nacional. Las
contingencias climáticas son azarosas (fuera de nuestro control y voluntad), pero
los yerros de política y sus pésimos resultados son responsabilidad ineludible del
gobierno.

INFLACIÓN

La variación prevista del Índice Nacional de Precios al Consumidor era de 3.3%
para el cierre de 2011 pero se presentó un repunte inflacionario en el último
trimestre y es posible que la inflación se aproxime a 4%. Para 2012 se pronostica
un registro de 3.6% que por las contingencias climáticas apuntadas y la probable
aceleración de la recuperación económica de los EUA, se antoja muy optimista.
Sin embargo, por la obsesión enfermiza del gobierno y Banco de México de
controlar la inflación, aunque ello signifique sacrificar el empleo y el crecimiento
económico, es muy posible que se alcance esta meta. Repito e insisto: reducir o
mantener baja la inflación implica pérdidas de empleo e ingreso. O lo que es lo
mismo: cancela las opciones para crecer económicamente e impide o complica el
necesario y muy deseado BIENESTAR.

Pero aun cuando lograr esta meta de inflación implica un gran costo económico y
social (sacrificio es la acepción correcta), así está pactado en la CARTA DE
INTENCIÓN a que me refiero en párrafo superior. El CONTROL DE LA
INFLACIÓN es uno de los diez puntos (políticas) contenidos en la CARTA DE
INTENCIÓN que también se conoce como CONSENSO DE WASHINGTON, o
DECÁLOGO DE WASHINGTON. O como muy irónicamente lo refiere Thomas L.
Friedman en su excelente libro Innovación vs. Tradición: "La camisa de fuerza
dorada".

TIPO DE CAMBIO

Se estima que la paridad a fin de este año rondará los 12.96 pesos por dólar, y los
12.82 en 2012. Es claro que hay una gran incertidumbre global en materia de
tipos de cambio por la situación complicada que vive Europa y especialmente el
Euro. En consecuencia esta propuesta de futuro debe tomarse con amplísimas
reservas.

Pero demás de lo complicado del escenario monetario global, no debemos dejar
de tomar en consideración que en México el Tipo de Cambio es una variable
determinada por el combate a la inflación, que como lo apunté y lo reitero, es el
eje central de la estrategia económica (del FMI) que ejecuta el gobierno mexicano.
El tipo de cambio es el "ancla" de la inflación, por absurdo que pueda parecer. Y
así ha sido en México desde 1983 y así han sido los resultados: con bajas
espectaculares en los registros de la inflación ... y del crecimiento económico; y
del empleo; y del ingreso; y en penosa suma, del BIENESTAR social.

PIB DE LOS EUA

Como economía de referencia, se calculó que EU crecerá 2.0% en 2012 aunque
en esta semana se dieron a conocer los indicadores oficiales del último trimestre
norteamericano, mismos que fueron muy positivos y superaron los pronósticos
más optimistas. Por ellos se elevó recientemente el pronóstico de crecimiento de
los EUA a un rango de 2.3-2.5% para este año. Evidentemente que esta mejora
económica de los EUA implica buenas noticias para la economía mexicana, tan
articulada (eufemismo por dependiente) con la del vecino país.

INDICES DE CONFIANZA

INEGI y el BANCO DE MÉXICO ofrecen indicadores mensuales sobre la
Confianza del Consumidor y la Confianza del Productor (base 2003=100). El
último Índice del Consumidor disponible no presenta grandes variaciones en los
últimos tiempos: fue de 89.2 en octubre de 2010, llegó a 95.5 en julio pasado y
bajó a 90.6 en los fines de noviembre.

Por su parte, el Índice del Productor muestra baja confianza (53 puntos) en
noviembre, un registro ligeramente inferior a los 56 puntos que la economía
registró en los 14 meses anteriores.

En nuestro próximo ESCRITORIO ECONÓMICO ampliaré el pronóstico. Y como
se trata de hablar del futuro, lo cito allá para el próximo domingo

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